lunes, 30 de abril de 2012

Amor de verano.


Hablamos de él. Y entonces ella me preguntó a qué sabían sus besos. Yo me quedé unos segundos pensando, porque no sabía resumir todas las sensaciones que sentía cuando me besaba. Saben a miel, limón y fresas. Saben a cielo, mar y tierra. Saben a paraíso y a infierno. Saben a todo y a nada. Ella empezó a reír y me preguntó qué sentía cuando estaba con él. Le dije que era como si diera la vuelta al mundo en unos segundos. Como si pudiera salir volando. Como si gritara debajo del agua. Ella rió aún mas alto, y me dijo que iba a ser una historia interesante, un bonito amor de verano.

jueves, 12 de abril de 2012

Y cuando sonríes...


- ¿Por qué me mentiste?

+ No lo sé. Creo que tenía miedo de no ser bastante para ti. Ya sabes, no ser bastante lista o bastante simpática; tenía miedo de no ser suficiente, de perderte por no merecer estar contigo.

- A ver. Eres increíble, eres capaz de hacerme reír más de veinte veces por minuto. Y cuando sonríes colocas los labios de una forma que me vuelve loco. Solo con mirarme sacas lo mejor de mí, me haces ser mejor persona. ¿No te parece eso suficiente?


Búscame.



Búscame cuando te apetezca, cuando notes que me echas de menos, cuando te mueras de ganas de tenerme. Búscame cuando no tengas a nadie que te diga que te quiere. Búscame cuando eches en falta las risas, las caricias que erizan la piel, las conversaciones sin rumbo, los abrazos en los malos momentos y las locuras. Búscame cuando necesites alguien que te sorprenda, cuando te des cuenta que nadie tiene esos detalles. Búscame cuando necesites que te digan lo especial que eres, lo bonita que es tu sonrisa, lo bien que lo haces y lo guapo que estás cuando te concentras. Búscame cuando mires el móvil esperando una llamada que ya no llega, cuando salgas y sin darte cuenta me busques con la mirada entre la gente, cuando inesperadamente alguien te toque la espalda y al girarte esperes que sea yo. Búscame cuando necesites cerillas para encender lo que se ha apagado, cuando mis ojos ya no te pidan guerra, cuando las discusiones sean aburridas y los días rutinarios. Búscame cuando las canciones carezcan de significado. Búscame cuando recuerdes los buenos momentos y te arrepientas de no tenerlos ahora. Búscame cuando tu ego necesite que le supliquen desesperadamente cariño, pero sobre todo, cuando quieras suplicarlo tú.

Necesito.



Necesito sus sonrisas para que aparezcan algunas de las mías, necesito sus tonterías con las que me hace sonreír, necesito sus abrazos en los que cuando me invada la tristeza poderme refugiar, necesito sus tan buenos consejos para seguir adelante, necesito todas y cada una de aquellas miradas con sus preciosos ojos que a mi personalmente me encantan, necesito tenerlo otra vez cerca, necesito volver a intentarlo aunque solo sea una vez, aunque solo sea durante un dia, como un sueño, necesito que el pase de ser mi sueño a ser mi gran realidad.

Háblame.


Háblame de estupideces, háblame de tristezas, háblame de amigos, háblame de enemigos, háblame de ti, háblame de mí, háblame de lo que tuvimos, háblame de todo eso que nunca te dije, háblame de lo que nunca me dijiste, háblame de lo que quiero que me digas… Háblame de esos besos que nunca llegaste a darme, háblame de aquellos abrazos que para mi eran mas que un mundo, háblame del frío del invierno y del calor de tus brazos acurrucándome junto a ti, háblame de cuando no me soltabas… Háblame de cuando éramos solo uno, háblame de cuando me mirabas y sonreías, háblame de todas y cada una de nuestras tonterías…
Háblame…

Te propongo.



Te propongo un viaje, un largo viaje que podamos hacer juntos sin preguntarnos, por una vez, el porqué. Te propongo volar cada instante en cuanto me mires a los ojos. Te propongo formar un nuevo mundo. Te propongo provocar una catástrofe gracias a nuestras locuras. Te propongo infinitos momentos sentados el uno junto al otro. Te propongo dar un vuelco a tu vida en tan solo un segundo. Te propongo cometer errores para después descubrir soluciones. Te propongo revivir ese dia. Te propongo todo lo que quieras pero sólo si lo hacemos juntos. Te propongo una salida a cada agobio. Te propongo segundos, minutos, horas… tiempo a mi lado. Te propongo largas llamadas, eternos mensajes. Te propongo más que un tú y yo, te propongo un nosotros. Te propongo lo imposible. Te propongo el comienzo, pero dudo proponerte el final. Te propongo un humilde pero eterno te quiero.