Dar una mano a alguien es mucho mas que hacer un
favor. No es dedicar unos minutos que te sobran o prestar una chaqueta que no
usas, es dar una parte tuya, es darte a ti. Dar la mano es aferrarte y aferrar
al otro. Cuando el mundo se vuelve un abismo y todo se cae tus manos no se
aferran a algo, se aferran a alguien, alguien que no te deja caer. Cuando tu
diste tu mano ya no hay forma de soltarla, ya no es tuya, esta unida a la del
otro, las dos manos son una. Las manos nos unen, nos suman, cuando damos la mano
dejamos de ser uno para ser nosotros. Mi mano ya no es mia, es tuya, o nuestra.
Nunca voy a soltarte la mano, pase lo que pase.
No hay comentarios:
Publicar un comentario